Amenazan ejidatarios con destruir la presa Yuribia

El futuro de la presa Yuribia es incierto. Por un lado, el Consejo de Vigilancia del Comisariado Ejidal del municipio de Tatahuicapan pretende destruir la planta el próximo 4 de diciembre y, por otro, el resto de los ejidatarios que forman parte del mismo comisariado han reconsiderado su postura e incluso, no descartan la posibilidad de permitir a Coatzacoalcos, Minatitlán y Cosoleacaque que sigan recibiendo una parte del agua que se capta del río Teziziapan.

Lo anterior ha dividido a los ejidatarios de la sierra de Tatahuicapan y será hasta el 4 de diciembre de este año cuando sesione la asamblea del municipio para decidir lo que sucederá con la presa que es operada por la Comisión Municipal de Agua y Saneamiento (CMAS) en Coatzacoalcos.

Actualmente, la presa opera con normalidad según los acuerdos firmados el 14 de mayo pasado entre los ejidatarios y los representantes del Gobierno de Veracruz, de Coatzacoalcos, Minatitlán y Cosoleacaque, pues los temas pactados han sido respetados por las partes.

Sin embargo, en Coatzacoalcos miles de usuarios sufren la falta del vital líquido en sus hogares pese a que en la sierra de Santa Martha las precipitaciones han sido recurrentes durante los últimos días.

De acuerdo con un grupo de ejidatarios de Tatahuicapan, el presidente del Consejo de Vigilancia –Inocente Bautista Luis- ha asumido una postura radical que busca destrozar la presa Yuribia el 4 de diciembre próximo.

El problema, afirman, obedece a que Bautista Luis pretende que los recursos que el Gobierno del Estado les adeuda aterricen en las arcas municipales, como sucedía anteriormente, y no en el comisariado, como se acordó el 14 de mayo pasado.

Por su parte, el Comisariado Ejidal que encabeza Pascual Lorenzo Ruiz ha reconsiderado su postura de dejar definitivamente sin agua a Coatzacoalcos, Minatitlán y Acayucan, pues los ejidatarios que simpatizan con él han reconocido que la presa es el mejor instrumento de presión para lograr apoyos, obras y beneficios para Tatahuicapan.

Si bien no contemplan que el 100 por ciento de los mil 200 litros de agua suministra la presa lleguen a Coatzacoalcos, los campesinos consideran abastecer de agua al puerto en los términos firmados hace un mes.

No obstante, los ejidatarios advierten que el ex – alcalde de Tatahuicapan –Esteban Bautista Hernández- ha tratado de influir en las decisiones del comisariado.

Relataron que el pasado fin de semana, Bautista Hernández y su gente intentaron boicotear una asamblea con la intención de poner a alguien al frente del comisariado que le facilite obras a él y su constructora, pues aseguran que como sin embargo, al ser consultado por este medio, el propio perredista desmintió lo anterior y aclaró que las decisiones las toma el pueblo y no el comisariado.

Incluso, dejó entrever que el dejar sin agua a Coatzacoalcos no es una opción viable para Tatahuicapan.

“Eso de no más agua para Coatzacoalcos es un arma de doble filo porque así se decía hace algunos días y cuando les vinieron a poner los millones de pesos en la mesa me pareció muy corriente utilizar a los ejidatarios que traen para un interés de tipo económico. Muy, muy mal se vieron”, refirió.

Acusó que detrás de todo esto hay fuertes intereses económicos y políticos que han desvirtuado el movimiento que inició en marzo de este año, en los que ha trascendido podría estar involucrada la diputada local, Gladys Merlín Castro.

Esteban Bautista, aclaró que ni como alcalde se quedó con recursos para obras, pues los recursos los recibe el gobierno municipal pero en sesión de cabildo el destino de éstos se discuten con los ejidatarios.

Por su parte, el alcalde de Tatahuicapan –Filogonio Hernández Bautista- afirmó que el tema de la presa Yuribia es un asunto complicado.

En entrevista, el munícipe recalcó que como autoridad municipal respaldará las decisiones que tome el pueblo.

Recordó que del 2006 a la fecha todos los convenios firmados con el Gobierno de Veracruz han tomado en cuenta a las autoridades ejidales. Prueba de ello –dijo- es que los recursos que las autoridades estatales asignaron por esta situación fueron destinados para caminos ejidales y no para obras en la cabecera municipal.

Incluso, Filogonio Hernández, manifestó que como presidente municipal desde el primer día de su gestión se acercó al comisariado para mostrarlos su postura.

No obstante, subrayó que la posible destrucción de la presa Yuribia va contra la ley, pero enfatizó que durante 20 años Tatahuicapan nunca recibió beneficios por la explotación de agua potable para beneficio de los usuarios de Coatzacoalcos, Minatitlán y Cosoleacaque.

“Yo no pido recursos y lo dije públicamente el día sábado que tuve una reunión con los ciudadanos: que nosotros aquí le pedimos obras al Gobierno del Estado porque nosotros trabajamos con proyectos”, agregó.