Agobia al PRD guerra de sus tribus; piden que dejen de ser grupos de presión

Por Excélsior | Domingo, Noviembre 23, 2014

CIUDAD DE MÉXICO.- Formado en 1989 como una unión de agrupaciones de izquierda y expriistas, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) continúa siendo una amalgama de corrientes y tribus que atraviesa por una crisis de identidad y operación política a raíz de los hechos violentos en Iguala y de la solicitud de su fundador, Cuauhtémoc Cárdenas, de que Carlos Navarrete renuncie a la dirigencia nacional de ese instituto político.

Entrevistado por Excélsior, Ricardo Pascoe, fundador del PRD que provenía del PRT, consideró que la crisis actual del partido es la manera en que se avaló la creación de corrientes desde la primera dirigencia con Cuauhtémoc Cárdenas, a quien responsabilizó de la multiplicación de tribus.

Jesús Ortega, líder de la corriente Nueva Izquierda, también conocida como Los Chuchos, rechazó que las tribus sean culpables de la crisis, aunque reconoció que se han convertido en grupos de presión, una situación que pidió corregir: “Las corrientes deben dejar de ser  espacios para ganar posiciones para que se conviertan en espacios que impulsen ideas”.

Pablo Gómez, también fundador del PRD, quien llegó del Partido Comunista, consideró sobre el llamado de Cárdenas a que renuncie Navarrete que en el partido  no se dispone de un mecanismo distinto para nombrar sustitutos, por lo que van a quedar los mismos.  “El partido tiene que cambiar, no solamente la dirección, sino como gran conglomerado”.

La desunión y el enfrentamiento internos en el PRD fueron de los temas abordados ayer en la reunión abierta en la que Cárdenas llamó a que se cree una nueva Constitución, y que fue convocada por los fundadores de la Corriente Democrática del PRI en 1987, una de las semillas de las que surgió el PRD.

Cárdenas rechazó que la reunión de ayer, a la que acudieron más de 200 personas, sea una reedición de aquella experiencia.  

TRIBUS ASFIXIAN AL PRD

Tres fundadores del partido, Ricardo Pascoe, Jesús Ortega y Pablo Gómez, expresan sus opiniones sobre la crisis que vive el perredismo, en el marco de los hechos del 26 y 27 de septiembre pasado en Iguala

El reclamo social de democracia, defensa de los derechos civiles, justicia electoral, combate a la corrupción, libertad de expresión y el rechazo al PRI-gobierno logró hace 25 años que distintos grupos de izquierda y con personalidad propia hicieran a un lado sus dogmas y sectarismo para fusionarse como un muégano y fundar el PRD.

Enarbolando el símbolo perene del comunismo, la hoz y el martillo, trotskistas, marxistas, leninistas formaron en 1988 el Frente Democrático Nacional, cigoto del PRD, y estuvieron encabezados por tres priistas de prosapia: Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, Porfirio Muñoz Ledo e Ifigenia Martínez.

Un cuarto de siglo después de la creación del PRD —actualmente es la tercera fuerza política de México— este partido sigue siendo una fusión de grupos. Aunque ahora este muégano está formado por corrientes o tribus, quizá con menos sustento ideológico, menos utópicos que sus fundadores, pero con más ambición de poder, pragmáticos y en pleno proceso de aburguesamiento, lo que aborrecían los primeros perredistas.

Tres fundadores del PRD, Ricardo Pascoe (Partido Revolucionario de los Trabajadores), Jesús Ortega (Partido Socialista de los Trabajadores) y Pablo Gómez (Partido Comunista Mexicano), dan a Excélsior sus opiniones sobre la crisis que vive el PRD, en el marco de los hechos del 26 y 27 de septiembre pasado en Iguala, Guerrero, donde murieron seis personas y están desaparecidos 43 estudiantes de la normal de Ayotzinapa, además del reclamo del ingeniero Cárdenas para que Carlos Navarrete renuncie a la presidencia de ese partido.

De estos tres fundadores del PRD, Pascoe, que desde 2003 está fuera del partido, pero que fue un hombre muy cercano al ingeniero Cárdenas, es el más crítico. Acusó que la “crisis actual del PRD es la manera en que se avaló la primera presidencia del PRD, la de Cárdenas”, y con ello, dijo, “la creación de las corrientes; yo creo que los más nocivo que le ha sucedido al PRD es autorizar y fomentar, de hecho, la creación de corrientes en su seno”.

Pascoe responsabilizó al ingeniero Cárdenas de la multiplicación de las tribus en el PRD, “porque con su estilo de gobernar él pensó que era mejor que hubiera un montón de corrientes y él de manera bonapartista negociaría un equilibrio con todas ellas, pero a la postre resulta un modelo fracasado”.

Ortega, quien fue presidente del PRD entre 2008 y 2011 y quien inició el reinado de la tribu conocida como Los Chuchos, pero que en realidad es uno de los líderes de la corriente Nueva Izquierda, es más complaciente con la existencia de las tribus y rechaza que sean el motivo de las crisis. “No lo creo, porque el PRD es un partido que se recrea en su pluralidad: si no asumimos esto como algo positivo entonces la alternativa sería un partido de la uniformidad en donde, como sucede en Morena, alguien toma las decisiones por todos”.

 

Gómez, estudiante en 1968 cuando ocurrió la matanza de Tlatelolco y que estuvo preso en la cárcel de Lecumberri hasta 1971, y que 28 años después, en 1999, fue presidente del PRD, prefiere el carril de la tranquilidad. “En la fundación del PRD los grupos actuales del PRD no existían. No estoy de acuerdo en que la dirección sea nombrada por dedazo, yo sí estoy de acuerdo en la representación proporcional”.

Toda la izquierda de México se fue al PRD

Los partidos políticos que en 1989 dieron vida al PRD en muy poco tiempo se diluyeron hasta desaparecer.

En la historia quedaron el Partido Mexicano de los Trabajadores (PMT), el Partido Socialista Unificado de México (PSUM), el Partido Popular Revolucionario (PPR), el Movimiento Revolucionario del Pueblo (MRP), la Unión de la Izquierda Comunista (UIC) y el Movimiento de Acción y Unidad Socialista (MAUS), y una parte del Partido Socialista de los Trabajadores (PST), que a su vez se había reunido antes de la creación del Frente Democrático Nacional para formar el Partido Mexicano Socialista (PMS), que fue el instituto que cedió su registro para darle vigencia al PRD.

Todos estos partidos y otras organizaciones fueron los que se cohesionaron en torno a la figura de un caudillo, Cárdenas Solórzano. El ingeniero, además de ser hijo del general Lázaro Cárdenas, tuvo el apoyo del ingeniero Heberto Castillo, convirtiéndose en pieza clave para la creación del PRD.

Castillo fue un luchador social nato. Participó en las luchas de los ferrocarrileros, de los normalistas y los médicos. En 1968 se convirtió en uno de los líderes del movimiento estudiantil. Por ese hecho fue encarcelado. Salió de la prisión de Lecumberri en 1971 y puso en marcha lo que planificó tras las rejas: fundar un partido.

En 1974 Castillo puso en marcha el Partido Mexicano de los Trabajadores. Fue el ingeniero Castillo quien promovió la unificación de varias expresiones de izquierda para formar el Partido Mexicano Socialista, del que fue candidato presidencial en 1988 y declinó en favor de Cárdenas para las elecciones donde el Frente Democrático Nacional acusó fraude electoral en favor de Carlos Salinas de Gortari.

Tan pronto como las distintas ideologías que había fundado el PRD se fueron confundiendo entre ellas mismas, surgieron las corrientes, las tribus que empezaron a disputarse el poder interno, la administración del presupuesto, el control de las candidaturas del PRD.

Mientras el PRD iba en crecimiento a nivel nacional y los triunfos electorales fueron multiplicándose, en las filas perredistas afloró otra diatriba: la disputa por los puestos de la administración pública de los gobiernos de los estados y la del Distrito Federal, que desde 1997 es del PRD.

Las tribus se comieron a las izquierdas

Actualmente en el PRD convergen las tribus que se denominan Movimiento por la Democracia; Movimiento Cívico; Red de Izquierda Revolucionaria; Unidad y Renovación; Nueva Izquierda; Izquierda Social; Izquierda Democrática Nacional, Alternativa Democrática Nacional y Foro Nuevo Sol.

Todas estas tribus tienen un jefe a quien le rinden cuentas y quien decide el futuro de los integrantes del grupo.

Movimiento por la Democracia, una de las tribus más nuevas, fue creada por Pablo Gómez y en ella convergen a quienes se conocen como la izquierda histórica, exintegrantes del Partido Socialista, que antes fueron del Comunista Mexicano, que fueron, como Gómez, víctimas de la represión por los hechos de 1968.

El Movimiento Cívico fue de hecho la primera tribu del PRD. El grupo que está encabezado por Mario Saucedo Pérez y Jesús Humberto Zazueta Aguilar es de postura izquierdista revolucionaria, socialista y anticapitalista. Son conocidos como Los Cívicos, ya que provienen de la Asociación Cívica Nacional Revolucionaria (ACNR).

La Red de Izquierda Revolucionaria, que encabeza  José Antonio Rueda y Pablo Franco, está compuesta principalmente por personas que formaron parte del Partido Comunista Mexicano, y con anterioridad habían sido miembros de partidos clandestinos de izquierda, cuando en México estaban proscritos.

Unidad y Renovación es membrete de Armando Quintero Martínez; en este grupo participan exsindicalistas universitarios, taxistas y solicitantes de vivienda.

Nueva Izquierda es la llamada tribu de Los Chuchos, que encabezan Jesús Ortega y Jesús Zambrano, con Carlos Navarrete como parte del equipo. Ellos tres han sido, consecutivamente, líderes nacionales del PRD.

Izquierda Social es, a su vez, una ruptura que tuvo la tribu Izquierda Democrática Nacional. Actualmente Alejandra Barrales es la cabeza más visibles de esta tribu, en donde Marcelo Ebrard había cifrado sus esperanza de llegar a la presidencia perredista.

Izquierda Democrática Nacional es el capital político que tiene Agustín Guerrero y Dolores Padierna, actualmente senadora de la Republica. Alternativa Democrática Nacional es encabezada por Héctor Miguel Bautista; su asiento principal está en el Estado de México.

Finalmente está la tribu Foro Nuevo Sol, de corte socialdemócrata, en donde la cabeza más visible es la de Amalia García, que ya fue presidenta nacional del PRD y son conocidos como Los Amalios.

“Pelean dentro lo que deben pelear fuera”

Después del pronunciamiento del ingeniero Cárdenas para que Carlos Navarrete deje la presidencia del PRD, por la crisis en que se encuentra ese partido, Excélsior solicitó a Ricardo Pascoe su opinión.

El exembajador de México en Cuba dijo que el PRD no solamente está sumido en una profunda crisis de identidad política, sino también de operación política y de las prácticas que ha desarrollado el PRD a través de los años.

“Básicamente el origen de todo este asunto de la crisis actual del PRD es la manera en que se avaló desde la primera presidencia del PRD, cuando Cárdenas era presidente, la creación de las corrientes, y yo creo que lo más nocivo que le ha sucedido al PRD es autorizar y fomentar, de hecho, la creación de corrientes en su seno.

“De tal manera que lo que debieran estar peleando afuera en realidad lo terminan peleando adentro, y este último zipizape con Cárdenas pidiendo la renuncia del Comité Ejecutivo Nacional es simplemente reflejo de eso, que han optado por el método de trasladar lo que debieran ser los conflictos hacia la sociedad los trasladaron hacia el interior del partido”, expuso Pascoe Pierce.

El exvocero de Cárdenas durante la campaña presidencial de 1988 no se traga la frase de que en el PRD convergen los que eran iguales, aunque pensaran distinto.

“Bueno, ésa es la frase; la realidad es que lo que hizo que se fusionara todo el partido en un primer momento en el 89 es el hecho de haber llegado a un acuerdo político de hacia dónde había que dirigir el país, y era ese acuerdo y no tanto un acuerdo de que cada quien mantendría su identidad propia o sus intereses específicos, y lo que esto demuestra es que nunca se logró en realidad superar de manera adecuada esa etapa de la formación del partido; está pagando hoy los platos rotos de no haber resuelto esto adecuadamente hace 25 años”, dijo.

Sobre si aprecia que el ingeniero Cárdenas quiere dar un golpe de timón en el partido que él y otros fundaron el 5 de mayo de 1989, Pascoe, dijo:

“Es lo que supongo que está planteando con este tema del llamado a la renuncia. Me parece que es un llamado irresponsable de Cárdenas, para con su partido,  de plantear las cosas así, porque en el fondo es un acto de desestabilización interna muy grave, y me da la sensación de que planea una ruta de escape del PRD, de poder deslindarse, salirse del PRD; no sé, eso no lo tengo muy claro, pero por lo menos es un instrumento que puede servir para una fuga si él lo está pensando.”

Dijo que independientemente de eso es una propuesta irresponsable, en el sentido de que no ayuda a resolver nada, especialmente si no hay una propuesta no simplemente de hacer un ajuste entre corrientes, que es lo que se escucha que él está proponiendo, hacer algo más equilibrado entre corrientes dentro del PRD en vez de tener un propuesta política.

A pregunta expresa sobre si los enemigos de la izquierda mexicana están dentro de sus filas qué va a pasar con el futuro del PRD y de la izquierda que se había fusionado en torno a este partido, señaló:

“Todo esto lo que refleja es que hay un sentimiento progresista de una parte de la sociedad mexicana; ese avance del perredismo reflejó lo que está sucediendo hoy. Es cierto lo que dice Cárdenas de que el PRD está en una crisis, porque lo que ha sucedido es que todo esto está cayendo en un descrédito, y al caer en descrédito esto abona automáticamente a que otras fuerzas llenen el vacío, especialmente en tiempos de crisis, donde hay radicalización de ciertos sectores de la sociedad mexicana, y que pueden ser propensos para proyectos alternativos, como Morena, o incluso como propuestas más a la izquierda y más radicales aún.

Señaló que es cierta la observación de que están en crisis, pero llevan mucho tiempo en crisis; no es nada nuevo, “para mí no es una crisis producto de un mal equilibrio entre tribus, que es lo que parecería estar diciendo Cárdenas, sino que es una crisis producto de una visión política del país, errática y probablemente errada en el fondo”.

Aparentemente, dice Pascoe, pareciera que lo que está sucediendo es que hay un mal reparto del pastel político en el PRD, “es lo que dice Cárdenas, por eso inmediatamente se sumaron a su propuesta todas las corrientes, Bejarano, otros grupos, pero de que Cárdenas se convierta en vocero de todo esos grupos sí me parece que es un devenir poco digno del ingeniero. Él siempre estuvo fuera. Él estaba al margen, pero él permitió que crecieran, porque con su estilo de gobernar, él pensó que era mejor que hubiera un montón de corrientes y él de manera bonapartista negociaría un equilibrio con todas ellas, pero a la postre resulta un modelo fracasado”.

“La crisis está en el Estado mexicano”

El exlíder nacional del PRD, Jesús Ortega, aceptó que su partido está en crisis, pero apuntó:

“La crisis no tiene necesariamente una connotación catastrófica, todas las personas viven algún momento crisis, las instituciones también; bueno, hay una crisis del Estado mexicano, yo creo que es la causa fundamental de los graves problemas que vive el país.

Y si no reconocemos en primer lugar la existencia de esas crisis, entonces hay incapacidad para enfrentar con éxito los desafíos y los problemas que se nos presentan. En el PRD yo reconozco que hay dificultades y problemas. Algunos más graves que otros, pero tenemos problemas, pero esos problemas no van a poder solucionarse si no asumimos que la problemática del PRD está inmersa en la problemática del Estado mexicano en su conjunto”, dijo.

El líder de la tribu conocida como Los Chuchos dijo que la crisis es del conjunto del sistema de partidos: “La crisis es, me atrevería a decir, del conjunto de la vida política del país. Y pretender que la crisis solamente está en un partido y luego que esa pretensión venga de propios compañeros del PRD, es un disparo al pie o al pecho de estos compañeros.

“Yo no me niego a analizar cualquier propuesta, y la del ingeniero Cárdenas es una propuesta que debemos analizar con serenidad, con sapiencia; en el PRD nada es indiscutible y todo se debe atender y tratar de comprender. La propuesta del ingeniero, siendo de buena fe, como lo creo, debe igualmente de atenderse, tampoco es imposible que se pueda atender positivamente la propuesta del ingeniero Cárdenas.

Mi opinión personal es que la solución no es la renuncia del CEN, pero eso es personal y nosotros no debemos guiarnos sólo por la opinión personal, necesitamos echar andar, para la renovación del PRD, las instituciones del partido y hay una, la que toma las decisiones fundamentales del PRD, las últimas, que es el Consejo Nacional.”

A pregunta de si la crisis se debía básicamente a la existencia de las tribus, Ortega dijo que no lo cree, porque el PRD es un partido que se recrea en su pluralidad; “si no asumimos esto como algo positivo, entonces la alternativa sería un partido de la uniformidad en donde, como sucede en Morena, alguien toma las decisiones por todos.

“No podemos regresar a los viejos tiempos del presidencialismo mexicano, en donde la hoja de un árbol no se movía sin la voluntad del presidente o de un individuo; las corrientes existen en el PRD como existen en todos los partidos políticos.

La pluralidad de las ideas es lo que crea pensamiento y por lo tanto, más que regresar a los tiempos de la unanimidad o de la uniformidad necesitamos avanzar en el reconocimiento de una pluralidad democrática en donde se pueden expresar con libertad las ideas y se canaliza adecuadamente. En todo caso no son las corrientes, es que las corrientes deben convertirse en verdaderas expresiones de pensamiento y no en grupos de presión y eso sí necesitamos corregirlo, eso sí creo que es una causa, que las corrientes deben dejar de ser espacios para ganar posiciones para que se conviertan es espacios que impulsen ideas”, señaló.

Jesús Ortega rechazó hacer una interpretación de lo que buscaría el ingeniero Cárdenas al pedir la renuncia de Carlos Navarrete como líder perredista. “Yo no quiero interpretar al ingeniero, no sé si su propuesta sea por la convicción de una disputa por el partido, él ha dicho que no y prefiero creer en que su propuesta es de buena fe, pero aun siendo así, me parece que no es el mejor camino para resolver algunos de los problemas de nuestro partido y menos para resolver los problemas del país. ¿Sabes qué es lo peligroso?: que en lugar de ver hacia el país, nos ensimismemos en los asuntos del partido; que el PRD pierda la calidad de protagonista político en el país. Y el PRD durante 25 años ha sido un protagonista que ha impulsado grandes cambios en México”.

“La dirección no se debe nombrar por dedazo”

El exlíder estudiantil de 1968, Pablo Gómez, señaló que la crisis que vive el PRD es moral y tiene que ser resuelta con mecanismos propios de una crisis moral.

Porque, dijo el exlíder nacional perredista, una crisis política es cuando no se ponen de acuerdo los integrantes de un órgano y sus diferencias son de orden político, “pero cuando es moral es cuando el partido es responsable de un hecho calificado como unánimemente desaprobado por el país entero, como lo que pasó en Iguala. Y desde antes de la postulación del candidato y luego de lo que ese candidato hizo y lo que el candidato dejó de hacer y luego lo que el gobierno de Guerrero dejó de hacer, sus omisiones, sus irresponsabilidades. Esto es una de las cosas por las que el PRD tiene que dar la cara. Por eso es una crisis moral, es una crisis de postulados”.

Sobre el llamado del ingeniero Cárdenas para que Navarrete deja la presidencia del PRD, dijo: “Yo creo que es normal que mucha gente en el país esté pensando en renuncias; yo no juzgo ese planteamiento, pero a mí no me preocupa que se plantee esto o que éstas se den, porque si se dieran las renuncias me preocuparía sobre cómo iban a nombrar a los sustitutos.

No disponemos de un mecanismo distinto para nombrar sustitutos, entonces van a quedar los mismos, yo por eso creo que no es política sino moral, el partido tiene que cambiar no solamente la dirección, también el partido como gran conglomerado. Ahora, las críticas que está haciendo Cárdenas son correctas, está diciendo cosas ciertas, todo el partido debería escucharle”.

Finalmente, sobre las tribus que predominan en el PRD, Gómez dijo: “En la fundación del PRD los grupos actuales no existían. En lo que no estoy de acuerdo es  en que la dirección sea nombrada por dedazo, yo sí estoy de acuerdo en la representación proporcional”.

VOCES DE IZQUIERDA CONVOCAN A GENERAR NUEVA CONSTITUCIÓN

Con la idea toral de “repensar a México” ante la evidente crisis de las instituciones políticas, el agotamiento del propio modelo económico que ha llevado al empobrecimiento de la mayoría de los mexicanos y la tragedia humanitaria derivada del caso Iguala, un grupo de políticos de izquierda, encabezados por el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, convocaron a los ciudadanos a erigir una nueva Constitución que responda realmente al país que hoy tenemos.

Ante cerca de 250 personas de diversas condiciones sociales, especialmente jóvenes, reunidos en la que fuera casa de su padre —hoy Fundación Lázaro Cárdenas—, el jerarca de las llamadas “fuerzas progresistas” de izquierda, Cárdenas Solórzano sostuvo que se busca otra Carta Magna:

Que actualice y amplíe los principios de soberanía, libertades y equidad. Pretendemos que regrese la vida institucional con instituciones útiles y dirigentes confiables, comprometidos con las causas del país y del pueblo.”

Además de quien ha sido ya tres veces candidato a la Presidencia de la República, también convocaron a esta reunión abierta Porfirio Muñoz Ledo, Ifigenia Martínez, César Buenrostro y Leonel Durán, es decir, los creadores de la llamada Corriente Democrática del PRI, en 1987.

De acuerdo con los presentes, entre quienes estaban los senadores Miguel Barbosa, Alejandro Encinas y Raúl Morón, así como Javier González Garza, Jorge Eduardo Navarrete, Clara Jusidman, Roberto Eibenschutz, Enrique Calderón Alzati, José Agustín Ortiz Pinchetti y Félix Hernández Gamundi, también se tocaron otros temas clave como la urgente aparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, la libertad de los 11 detenidos por las protestas del 20 de noviembre y los voceros de la tribu yaqui, Mario Luna y Fernando Jiménez, la desunión y enfrentamiento que privan en el Partido de la Revolución Democrática e incluso la demanda de algunos grupos por la dimisión del Ejecutivo, aseveró el mismo Encinas Rodríguez.

Cuauhtémoc Cárdenas aclaró a los medios y a sus invitados que este grupo no busca reproducir esta Corriente (Democrática), sino “contribuir a una movilización plural para apoyar, desde nuestras diferentes trincheras, movimientos y causas legítimas y justas de la gente, y el surgimiento de propuestas que planteen soluciones de fondo a los problemas del país”, machacó.

Ante una duda, el que fuera también gobernador priista de Michoacán consignó que “de ninguna manera se debe pensar que pretendemos deshacernos de las instituciones y de la vida institucional, ya que hay mucho que sirve por mucho que haya que arreglar”.

Sobre esto, el vicecoordinador político del PRD en el Senado, Alejandro Encinas, recalcó que uno de los temas que se vio en esta junta, eso sí, fue que lo ocurrido en Iguala no significaba sino que la crisis de desconfianza y credibilidad al interior de los partidos ya había llegado a la izquierda en general y al perredismo en particular.

Hay que enfrentar esta situación —resaltó el legislador— y buscar no solamente recuperar esa credibilidad sino principalmente encontrar la verdad sobre estos hechos para iniciar la transformación del país que nos permita la conformación de un nuevo pacto social, una nueva Constitución y nuevas reglas de convivencia entre los mexicanos.”

Convocante a esta junta, Porfirio Muñoz Ledo detalló que México transitó de un sistema de partido hegemónico a uno de partidos incapaz de devolver al pueblo sus derechos ciudadanos, y esto se traduce, por ejemplo, en que la Suprema Corte de Justicia de la Nación cancela a los ciudadanos su facultad inalienable de revocar las disposiciones adoptadas por los Poderes de la Unión.

También excandidato a la Presidencia, Muñoz Ledo aseveró a los presentes que lo ocurrido a los normalistas de Guerrero no es sino un acontecimiento de extrema gravedad contra los jóvenes, que ha encontrado un repudio unánime de la sociedad y claro, “calcinado lo más íntimo de la conciencia mundial”.

Alejandro Encinas comentó al final del evento que tras esta reunión habrá un pronunciamiento del grupo en un documento central exigiendo el esclarecimiento de los hechos de Iguala, la aparición con vida de los 43 normalistas de Ayotzinapa, “el compromiso de recoger toda la discusión para elaborar un documento”, sin soslayar el debate que tendrá Cárdenas con Carlos Navarrete el próximo martes.

En tanto, la exdiputada Adriana Luna Parra exigió la necesidad de que la actual dirigencia nacional del PRD, liderada por Carlos Navarrete, renuncie, porque “hay más Abarcas”.