Se desbordan arroyos en Álamo: 150 familias damnificadas; inicia la Sedena el Plan DN-III

Álamo-Temapache, Ver.- Las precipitaciones de ayer viernes 13 de noviembre desbordaron los arroyos El Ídolo y Oro Verde en Álamo, con un saldo de más de 150 familias damnificadas, por lo que personal del 39 Batallón de Infantería implementó el Plan DN-III-E de auxilio a la población civil, coordinando acciones con el Plan Tajín de la Fuerza Civil de Veracruz y el Comité Municipal de Protección Civil. En Tuxpan se reportan dos árboles caídos y una barda perimetral colapsada, mientras que en Poza Rica sólo encharcamientos en colonias.

De acuerdo con los primeros reportes de Protección Civil, se estiman alrededor de 150 familias afectadas en las colonias Villas de San Clemente, Lombardista, Magisterial, Estero del Ídolo, Pozo 50, Ampliación López Portillo y Jacarandas, por lo que fueron habilitados dos refugios temporales para la atención de la población damnificada.

José Roberto Rojas Hernández, coordinador regional de la Secretaría de Protección Civil en Tuxpan, informó que se mantiene el monitoreo permanente de los arroyos El Ídolo y Oro Verde, en tanto que el río Pantepec por el momento no representa riesgo alguno para la población.

A la entrada de la ciudad de Álamo, los escurrimientos pluviales y el desbordamiento de los arroyos habían provocado que la carretera federal quedara bajo el agua, por lo que se analizaba la posibilidad de cerrarla a la circulación para prevenir accidentes.

Esta situación provocó que personal del 39 Batallón de Infantería, con sede en la ciudad de Tuxpan, activaran el plan DN-III-E de auxilio a la población civil, en tanto que la Fuerza Civil de Veracruz activó el Plan Tajín.

Rojas Hernández informó que en lo referente al municipio de Tuxpan, la dirección municipal de Protección Civil reportó la caída de un par de árboles así como la de una barda perimetral, además de anegamientos en diferentes colonias del puerto, sin que se presentasen mayores daños a la población.

Temor de inundaciones por muro en el río Cazones, en Poza Rica

Familias asentadas en las colonias ribereñas siguen temiendo quedar inundadas a causa de los escurrimientos pluviales provenientes de las parte altas de la ciudad y que antes fluían directamente al río Cazones. El ayuntamiento de Poza Rica pretende construir ahora una rejilla tragatormentas que encauce el agua de lluvia para evitar encharcamiento, lo que daría mayor certidumbre a los habitantes.

Martín Valderrábano Domínguez, director de Agua Potable y Alcantarillado, informó que si bien el muro no ha sido puesto a prueba, pese a las fuertes lluvias registradas en días pasados, el temor de quienes habitan en las cercanías es que pudieran quedar inundados por los escurrimientos pluviales y que en días pasados alcanzaron profundidades de 20 a 30 centímetros en las partes más bajas.

Para mayor certidumbre de estas familias, el ayuntamiento construirá una rejilla tragatormentas que permita encauzar el agua de lluvia hasta el colector pluvial que corre a un costado del muro; tubería de 1.2 metros de diámetro y que tiene la función de drenar el agua de lluvia y evitar que se empoce.

Detalló que la empresa encargada de la construcción del muro de contención dejó un pozo de visita habilitado para captar estos escurrimientos; sin embargo, esta quedó muy alta, lo que preocupa a los vecinos y motivo por el cual la dirección de agua potable y alcantarillado en coordinación con obras públicas construirán la rejilla.

Desde el inicio de la construcción han sido constantes las reuniones con los vecinos para mantener una certeza de la seguridad de la obra. Esto permitió la conexión de varios drenajes sanitarios domiciliarios a la red general, en meses pasados. Respecto a la solicitud de ampliación del muro en el sector conocido como La Quebradora, la Conagua dictaminará la factibilidad y dado el caso gestione los recursos necesarios.